10 experiencias que tienes que vivir en La Palma

La más verde de las Islas Canarias, La Palma es el lugar perfecto para vivir la naturaleza en estado puro. ¡Acompáñanos!

La Caldera de Taburiente, La Palma

Quizás más que ninguna otra isla de las Canarias, la pequeña La Palma es verde, frondosa y fragante. Y está llena de naturaleza salvaje en la que te sentirás como si hubieras viajado en el tiempo. Aquí podrás pasear por los bosques del norte, deambular por el sur de la isla lleno de cráteres de volcanes y formaciones rocosas inigualables… Sin olvidarnos del increíble Parque Nacional de la Caldera de Taburiente. ¿Todavía te extraña que toda la isla sea una Reserva de la Biosfera de la UNESCO?

Camina por La Palma…Que su energía entre en tu cuerpo

En la isla bonita encontrarás 706 kilómetros con senderos de todo tipo: largos, cortos; muy duros, menos duros, fáciles…Todos ellos son caminos que te llevan a rincones originales, únicos que llegan a cortar tu respiración. Unos te muestran zonas de frondosa vegetación. Otros volcanes dormidos o, incluso, costas llenas de acantilados. Y hasta los hay que te llevan al interior de una “caldera” en una experiencia 100% increíble.

 1, 2, 3…  delfines. 1, 2 ,3… peces voladores

El Puerto de Tazacorte es el punto de partida para excursiones en barco inolvidables por la costa de este municipio y la del vecino Tijarafe. Las rutas marítimas te llevan hasta el interior de la Cueva Bonita, un lugar mágico que refleja en su techo el fascinante color que los rayos del sol crean al entrar en contacto con el agua. Alucinarás en cuanto veas la miríada de delfines y peces voladores que serán testigos de tu paso por los mares de La Palma.

Pide tu mayor deseo con cada estrella fugaz que veas en el cielo de La Palma

La Palma es uno de los mejores lugares del mundo para disfrutar de la astronomía. No podía ser de otra manera ya que su cielo nocturno es toda una lección al aire libre de esta ciencia. Aléjate de las zonas urbanas y aprovecha la oscuridad de la noche para mirar al cielo, contar las estrellas, buscar constelaciones y disfrutar de la tranquilidad, la quietud, el silencio y la paz del entorno. Escucha el mensaje de las estrellas y pide, con cada estrella fugaz, un deseo. ¡Seguro que se cumplen!

Descubre un nuevo mar: el de nubes

Seguro que te suenan (o conoces ya) el mar Cantábrico, el Egeo y muchos otros. Pero, ¿qué sabes del mar de nubes? Este fenómeno de la naturaleza sucede a menudo en La Palma y es fruto del encuentro entre los vientos alisios y las altas montañas de la isla. Es increíble ver cómo separa el mundo de debajo y el de arriba. El mar de nubes produce, además, otro fenómeno muy curioso (y totalmente imprescindible): la cascada de nubes. Esta maravilla de la naturaleza se forma cuando el océano nuboso rebasa las montañas de la vertiente sur y baja por la ladera como si fuera una cascada de aguas de algodón.

Relájate en el spa natural que esta isla es

Cuando estés en la playa en “la isla bonita” deja que el calor de la arena negra atraviese la toalla y relaje tus músculos. Date un chapuzón y grita de alegría cuando una ola te dé un revolcón refrescante. Cierra los ojos, deja que el yodo penetre por todos los poros de tu piel mientras te balancean las olas del Océano Atlántico. Otra opción es bañarte en una piscina natural improvisada entre rocas o tenderte en el agua, dejando que el elemento líquido te arrulle. Disfruta de lo que es tener una playa para ti solito. Duerme la siesta bajo un pino y llena tus pulmones con su fragancia inconfundible. Tómate tu tiempo ante la inmensidad abismal de un cráter o un barranco profundo y guarda cada detalle del paisaje en tus recuerdos. Tu viaje a La Palma será inolvidable.

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