A todos nos gusta viajar, descubrir y conocer nuevos sitios. Algo que, en ocasiones, pensamos que se encuentra fuera de nuestro alcance. Por eso, en este artículo te traemos diez lugares a los que puedes viajar con una gran relación calidad-precio, sin necesidad de gastarte todo tu dinero en grandes viajes.
Esta región a menudo ignorada de Indonesia recompensa a quienes pasan por Bali y siguen más allá, mucho más allá.
Estas islas albergan playas preciosas, más tranquilas que las del oeste, y el archipiélago de Alor ofrece algunas de las mejores escenas submarinas del país.
En algunos lugares uno se sentirá como un descubridor y verá que hay menos gente que en Bali, Lombok o las Islas Gili.
Si se busca arena blanca, buceo espectacular y menos gente, Nusa Tenggara es el «país de las maravillas» © Afriandi / Getty Images
Dado que la isla de Komodo cerrará al público en el 2020 para que la población del dragón epónimo se recupere, quien quiera ver a estos grandes lagartos tendrá que ir a Rinca.
Sea cual sea el destino, el ambiente sencillo y la fiabilidad del turismo alternativo hacen que se gaste menos dinero.
Los trayectos básicos en barco son una forma popular de desplazarse entre Lombok y Flores.
Esta experiencia mochilera clásica es ideal para ver el país. Dormir en las cubiertas reduce todavía más los costes, pero conviene saber qué va incluido en el precio.
De todas las grandes ciudades de Centroeuropa, Budapest es una de las más gratificantes para el bolsillo y tiene puntos de interés memorables.
Conviene ir a ver unas termas poco visitadas donde, por unos pocos euros, es posible bañarse en las cálidas aguas que han dado fama a la ciudad.
Budapest es el hogar de una historia dramática, una arquitectura extravagante y aguas termales curativas © ZGPhotography / Shutterstock
Por toda Budapest hay animados bares de vinos, atrevidos “ruin bars” en edificios antiguos con carisma y versiones modernas de la famosa cultura de los cafés de esta ciudad.
Pasear entre las maravillas modernistas de la urbe, incluida la estación Budapest-Keleti (que sigue siendo el mejor lugar para llegar o partir de Budapest), no cuesta un céntimo y da para muchas fotos en Instagram al final del viaje.
La mayoría de las termas de la ciudad tienen sesiones de medio día o de tarde-noche más económicas, por mucho menos de lo que cuesta la entrada de un día entero. ¡Que nadie olvide el gorro de natación ni la toalla!
En este estado indio la observación de fauna es muy diferente, empezando por el precio. Los circuitos resultan mucho más económicos que en África.
Además, en las reservas del estado, incluida la Reserva de Tigres de Bandhavgarh y el Parque Nacional de Pench, hay mucho más que ver aparte de los tigres: se avistan jabalíes, ciervos moteados y langures.
En la Reserva de Tigres de Bandhavgarh de Madhya Pradesh se pueden ver Tigres de Bengala © Nimit Virdi / Getty Images
Es una experiencia bastante distinta a la de un circuito africano: ver a un tigre, un fugaz atisbo de su famosa piel rayada entre la vegetación, es todo un acontecimiento; pero tampoco es raro no ver ninguno, si bien las oportunidades aumentan ahora que su población se recupera lentamente.
En el resto del estado destacan enclaves tan conocidos como los templos de Khajuraho y los históricos poblados de Orchha y Mandu, que atraen menos visitantes que los grandes puntos de interés de la vecina Rajastán.
Los fuertes y palacios de Gwalior son una visita más tranquila después de Agra, a dos horas de carretera, y comparativamente la ciudad tiene precios más bajos para casi todo.
El resurgir de Búfalo continúa. Visitarla ahora permite aprovechar la expansión de las rutas aéreas de bajo coste y el boyante panorama de hoteles y restaurantes de la ciudad.
El súper interactivo Children’s Museum de la ciudad abrirá en el 2020 y las casas recién restauradas de Frank Lloyd Wright de Graycliff Estate y Martin House Complex son otro punto destacado.
El ayuntamiento de Búfalo es una obra maestra del ‘art déco’ © Paul Brady / Alamy Stock Photo
Los visitantes pueden explorar el panorama culinario de la ciudad en EXPO Market, un moderno food hall, o ir de catas a Resurgence Brewing Company, una cervecería artesanal en una antigua fábrica de motores.
Las atronadoras cataratas del Niágara están a media hora en tren o autobús y son una estupenda excursión de un día, con la ventaja añadida de que permiten optar a los alojamientos más carismáticos de Búfalo.
El enorme ayuntamiento de Búfalo es un tesoro del art decó. Se puede visitar con un circuito gratuito entre semana a partir de las 12.00 y gozar de las vistas desde la plataforma-mirador al aire libre.
Azerbaiyán es un destino casi exclusivo que se puede visitar por poco dinero teniendo en cuenta la calidad de su oferta en alojamiento, gastronomía y experiencias.
Bakú, frente al mar Caspio, posee arquitectura ambiciosa, museos originales y un ambiente cosmopolita reforzado por un perfil global al alza.
Bakú cuenta con muchas maravillas arquitectónicas, como la Mezquita Heydar © Alexander Melnikov / 500px
Sí, uno todavía está en Europa, aunque en las afueras de Bakú, catalogado por la Unesco, le aguarde un paisaje misterioso de volcanes de barro y tierra ardiente. Se puede viajar por un interior de pueblos que cambian con rapidez y aldeas que se perdieron en el tiempo.
El norte y el oeste del país tienen al omnipresente Cáucaso como telón de fondo, lejos de las hordas turísticas pero siempre cerca de una de las acogidas más hospitalarias que existen.
Los vuelos y el alojamiento en Bakú son lo más caro de una visita a Azerbaiyán; conviene considerar las conexiones vía Budapest (Wizz Air) y Estambul (Buta Airways) para reducir costes.