Córdoba en un día: visitas imprescindibles
Córdoba al atardecer (Pedro Otones / Flickr)
Si buscas hacer una escapada a una ciudad con grandes atractivos patrimoniales, rincones con encanto y una deliciosa gastronomía, esa es Córdoba en Andalucía.
Visitar Córdoba es muy fácil pues se trata de una ciudad muy manejable, en la que los principales rincones los podrás conocer andando.
Huyendo de los rigores del verano, las otras épocas del año son ideales para descubrir esta bonita ciudad andaluza que forma parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco gracias a su centro histórico donde destaca el maravilloso monumento de la Mezquita.
Además, esta ciudad está muy bien comunicada gracias al AVE que, por ejemplo, te llevará desde Madrid en solo una hora y 45 minutos, lo cual es una invitación para hacer una escapada para visitar Córdoba en un día.
A continuación te voy a proponer una ruta para visitar Córdoba en 14 pasos, tras nuestra reciente visita a la ciudad.
A partir de esta información tu mismo vas regulando el tiempo que dedicas a las visitas, según tu disponibilidad y preferencias.
Plaza de las Tendillas
Nuestro visita a Córdoba la comenzamos en la plaza de las Tendillas, el eje donde se desarrolla y organiza la vida comercial de la capital cordobesa, y la cual sirve como conector de las principales avenidas comerciales que son las calles de Cruz Conde y Gondomar.
Aunque los orígenes de este enclave datan del siglo XIV, en 1908 comenzó el proceso de formación de la plaza, ensanchándose del este hacia oeste.
La plaza esta coronada por una estatua ecuestre del Monumento al Gran Capitán, de 1927.
Templo Romano
Aunque Córdoba posee los restos de varios templos romanos, este es el más importante encontrado por excavación.
El Templo Romano de Córdoba es de estilo corintio, con 32 metros de largo por 16 de ancho, y fue construido a lo largo de la mitad del siglo I para luego sufrir varias modificaciones en el siglo II.
Actualmente, los únicos restos que pudimos ver son su cimentación, la escalera, el altar y algunos fustes de columnas y capiteles.
Las formas que se ven hoy día son el resultado del proyecto de reconstrucción a mediados del pasado siglo XX, durante la construcción del Ayuntamiento de Córdoba.
Palacio de Viana
El palacio de Viana es una valiosa muestra de casas solariegas de la nobleza cordobesa.
En realidad la visita al palacio es una visita doble, pues además de recorrer el interior del palacio con un visita guiada, también puedes ver los patios y jardines.
En nuestro caso visitamos todo el complejo, empezando por uno de sus principales atractivos, los doce patios y el jardín. que rodean el palacio.
Seguidamente nos apuntamos a la visita guiada por el interior del palacio de Viana donde pudimos ver las estancias que ocuparon los marqueses de Viana con su decoración original y algunas recopilaciones de objetos y obras artísticas.
Plaza de la Corredera
La Plaza de la Corredera es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Córdoba y que más nos ha gustado.
Esta plaza es la única plaza mayor cuadrangular de Andalucía, y la encuentras en el mismo centro de la ciudad. Tiene su entrada y salida a través de los llamados Arco Alto y Arco Bajo.
Con el paso del tiempo la plaza ha tenido numerosas remodelaciones y ha sido utilizada con diferentes fines, principalmente festivos, tales como las corridas de toros de las cuales deriva el actual nombre de la plaza.
El 18 de diciembre 1981 fue declarada Bien de Interés Cultural.
Mezquita de Córdoba
La mezquita es, sin duda, el gran monumento de la ciudad, que en la actualidad tiene la consideración de catedral cristiana de Córdoba.
Se trata de un gran exponente del arte árabe en España que fue construido entre los siglos VIII y X, en el momento de pujanza del Califato Omeya en Córdoba.
La visita de la mezquita de Córdoba tiene muchos apartados pues ya en el muro exterior encuentras rincones interesantes, como las puertas de Al Hakam II.
Una vez entras por alguna de las puertas de entrada, la principal, la puerta del Perdón, accedes al muy bonito Patio de los Naranjos.
Ya en el interior tendrás muchos rincones para ver, desde los restos arqueológicos de la original iglesia visigoda, hasta los lugares con mayor riqueza artística de lo que fuera mezquita, el mihrab y la macsura.
También podrás ver la nave gótica que se construyó en su interior durante el siglo XII tras la Reconquista, y por supuesto la basílica renacentista de la catedral católica.
En suma la más imprescindible de las visitas en tu escapada a Córdoba.
Estatua de San Rafael
En cuanto salimos de la Mezquita nos dirigimos hacia el río y nos encontramos el Triunfo de San Rafael, que es uno de los muchos triunfos existentes en la ciudad.
Dedicado al arcángel San Rafael, ángel custodio de la ciudad, este monumento lo encontrarás situado en la plaza del Triunfo del barrio de la Catedral, dando a la Puerta del Puente Romano.
Puerta del Puente
La Puerta del Puente es una de las tres únicas puertas que se conservan de la ciudad de Córdoba, junto a la Puerta de Almodóvar (por la que pasamos más tarde) y la Puerta de Sevilla.
La actual puerta se sitúa en un enclave donde antaño también se localizaba una puerta romana que unía la ciudad con el Puente Romano y la Vía Augusta, y posteriormente una puerta musulmana.
La configuración de esta puerta tal como la vemos ahora es el resultado de una remodelación realizada en el siglo XVI.
Puente Romano
También conocido como “el Puente Viejo“, fue el único puente con que contó la ciudad durante 20 siglos, hasta la construcción del Puente de San Rafael, a mediados del siglo XX.
Construido a principios del siglo I durante la época de dominación romana en Córdoba, la estructura actual del Puente Romano se remonta a la Edad Media, cuando posiblemente se sustituyera un inicial puente de madera.
Torre de la Calahorra
Cuando cruzamos andando el Puente Romano nos encontramos al extremo este la Torre de la Calahorra, usada desde la época de la dominación musulmana como una torre de vigilancia.
A lo largo de su historia ha tenido numerosas reconstrucciones, principalmente una en la época califal, y otra con el refuerzo que se llevó a cabo durante el siglo XII.
En la actualidad la Torre de la Calahorra alberga el denominado museo Vivo de al-Andalus, en el que se muestra la convivencia existente entres las culturas judía, cristiana y musulmana.
Alcázar de los Reyes Cristianos
Regresando de nuevo por el Puente Romano, llegas al Alcázar de los Reyes Cristianos, una fortaleza levantada en 1328 por el rey cristiano Alfonso XI en el lugar que ocupara el antiguo Palacio Califal de los Omeya.
En la visita de esta fortaleza en la que residieron los Reyes Católicos podrás subir a las murallas y la Torre del Homenaje, desde donde tendrás bonitas vistas del centro histórico de Córdoba.
Pero además podrás pasear por sus jardines y visitar el interior del edificio que ahora alberga un museo con objetos y mosaicos de la época romana recuperados en excavaciones llevadas a cabo en la ciudad.
Caballerizas Reales
Frente al Alcázar de los Reyes Cristianos tienes las Caballerizas Reales. Incluso las podrás ver desde las murallas de la fortificación.
Las Caballerizas Reales se fundan en el siglo XVI, cuando Felipe II mandó desarrollar una raza de caballos genéticamente perfecta, el pura raza español.
El rey buscaba conseguir un caballo con la elegancia de los caballos árabes pero que sirvieran para la guerra; para ello reforzó el caballo árabe, lo alzó y propició el desarrollo de un cuello y patas más poderosas.
Actualmente en las caballerizas podemos encontrar todo tipo de espectáculos ecuestres; en nuestro caso nos quedamos con las ganas de ver alguno, pero nos lo apuntamos sin duda para nuestra próxima visita a la ciudad.
Patios del Alcázar Viejo
Cada año en Córdoba durante el mes de mayo tiene lugar en toda la ciudad el Festival de Patios Cordobeses, un concurso que en toda la ciudad de forma que los patios se abren al público para poder visitarlos.
Pero originalmente el concurso se ceñía a la a la zona del Alcázar Viejo, que es donde surgió la idea de mostrar los patios a los visitantes.
Ahora los propios vecinos de la zona han lanzado una iniciativa para poder mostrarlos durante todo el año, para lo que te proponen una ruta por los patios (precio, 6 euros) durante la que los propietarios te los enseñan contándote las curiosidades históricas y detalles de cada uno.
La visita la hicimos a finales de verano, y sin duda fue una de las que más nos llamó la atención en Córdoba. Sin duda repetiremos en primavera para aprovechar el momento de floración donde los patios se muestran en su máximo apogeo.
Barrio de la Judería
Visitar Córdoba es sinónimo de pasear por la Judería, el barrio que se extiende junto a la Mezquita, y en el que vivió la población judía entre los siglos X y XV, hasta su expulsión.
Ahora es un entramado de estrechas callejuelas en las que encuentras tiendas de artesanía y souvenirs, así como bares de tapas y restaurantes.
Es el barrio por que el los turistas nos movemos durante la visita de Córdoba, y donde puedes encontrar rincones como la antigua Sinagoga del año 1315 o el museo Casa Sefarad.
Puerta de Almodóvar
La Puerta de Almodóvar es una de las tres únicas puertas que se conservan hoy en día de la muralla medieval de la ciudad de Córdoba.
De origen árabe, de la época de Abderramán I, lo que actualmente se conserva es una reconstrucción posterior realizada en el siglo XIV por los cristianos, la cual podrás cruzar muy cerca del Alcázar de los Reyes Cristianos.
Mercado Victoria
Nuestra ruta turística por Córdoba la terminamos cenando en el Mercado Victoria, un rincón gastronómico del estilo del Mercado de San Miguel en Madrid o el de la Boquería en Barcelona.
En el podemos encontrar una amplia gama de cocinas, tanto nacional, con productos cordobeses y españoles, como internacionales.
Además es un bonito lugar donde terminar una jornada de turismo por la ciudad y relajarse para en nuestro caso volver al día siguiente a casa.
Más visitas en Córdoba
Ahora bien, se nos han quedado en el tintero otros numerosos rincones interesantes de conocer y visitar en Córdoba.
Entre ellos, el museo Julio Romero de Torres, la plaza de los Capuchinos con el Cristo de los Faroles y la cercana Cuesta de Bailio, las iglesias Fernandinas, o los cercanos restos arqueológicos del complejo palaciego de Medina Azahara.
Claro, esto requiere al menos dedicar un día más a la visita de la ciudad andaluza, que bien se lo merece, y además te permitirá hacer la muy recomendable visita nocturna de la Mezquita de Córdoba.
Seguro que no te arrepentirás.
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