De crucero por los fiordos noruegos

Noruega es sin dudarlo uno de los destinos estrella, situado en el Top 5 de los destinos más solicitados por los cruceristas de todo el mundo. Y el motivo es simple, pocas experiencias a bordo de un barco sobrecogen más que navegar por los silenciosos fiordos noruegos. Son muchos los viajeros que esperan que llegue el verano para poder recorrer los espectaculares fiordos que se pueden ver en gran parte de Noruega. Una naturaleza desbordante y unos paisajes únicos en el mundo.

En 2009 la prestigios revista de viajes NATIONAL GEOGRAPHIC TRAVELER MAGAZINE, concedía a los fiordos de VESTLAND, situados en el oeste noruego, el galardón a la atracción mejor conservada de todos los lugares declarados PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD por la UNESCO. Imaginaros entonces la maravilla que os estáis perdiendo…. Naturaleza en estado puro.

Podéis iniciar el crucero desde atractivas ciudades como Ámsterdam, Copenhague o Hamburgo, lo que sin duda añade un nuevo aliciente a nuestras vacaciones, ya que permite iniciar el viaje disfrutando de la belleza y atractivos desde cualquiera de estas 3 ciudades, sin duda de las más hermosas de Europa.

Elegimos Copenhague, la ciudad de la sirenita, como puerto de salida de nuestro crucero. Copenhague es una ciudad sorprendente, artística, experimental y cosmopolita. La capital danesa te inunda con cafés, cultura e historia. Los canales de la ciudad son la mejor vía para ver y saborear la ciudad, mientras que en tierra firme las terrazas del Nyhavn (puerto viejo) irradian el gran amor de los daneses por el  “hygge” o el sentimiento de bienestar. La reputación gastronómica de Copenhague ha experimentado un tranquilo renacimiento durante la última década; buen ejemplo de ello es el restaurante Noma de René Redzepi,  elegido los últimos 3 años, mejor restaurante del mundo, por la prestigiosa revista gastronómica Restaurant Magazine.

Finalizada nuestra estancia en Copenhague, embarcamos en el crucero COSTA LUMINOSA, una verdadera ciudad flotante, que nos llevará a conocer durante 8 días los lugares más increíbles de las costas de Noruega. Era la primera vez que nos embarcábamos en un crucero, y la experiencia no ha podido resultar más gratificante, por su comodidad (no hay que estar todo el día acarreando maletas de un hotel a otro), la perfecta organización, la amabilidad de todo el personal del barco, y por ser, en mi opinión, la mejor forma de disfrutar de la belleza de los fiordos.

Los vikingos llenaron de leyendas y de seres mitológicos estas costas. En el fondo de sus fiordos descansan doncellas de amores no correspondidos, dragones de suaves escamas o reyes crueles. El mar y sus glaciares dibujaron en este país de perfil sinuoso una sucesión de entrantes y salientes perfectos para esconder a estos seres fantásticos, cuyas historias se cuentan de generación en generación en sus largas y frías noches de invierno.

Para visitar Noruega hay dejarse llevar por la imaginación y hacerse acompañar por los sueños. Las fuerzas mitológicas vigilan el agua del mar, sus lagos y ríos, incluso las profundidades de los valles y montañas. Nadie lo duda: Noruega es una de las reservas naturales de Europa, con sus espectaculares fiordos, sus bosques infinitos, sus días completos de sol en verano y sus sorprendentes auroras boreales. En Noruega nos esperan hermosas ciudades, cumbres que superan los 2.000 metros de altitud y archipiélagos que bordean el Círculo Polar Ártico. Es un país para visitar y disfrutarlo, sin complejos… Un auténtico paraíso de los deportes al aire libre y de la contemplación de la naturaleza.

Pero Noruega es, sobre todo, el país de los fiordos, esos valles que el mar excava entre las montañas aprovechando la desembocadura de un glaciar que, al encontrarse con el mar, va fundiéndose hasta quedar inundado por el agua salada en un intrincado abrazo. Los fiordos se adentran entre altos escarpes cubiertos de verde y, a lo lejos, adivinando la nieve que cubre en invierno el interior del país. Los noruegos viven en y por los fiordos. No es un simple accidente físico. Siempre ha sido el sustento vital para los pueblos que se asentaron en este entorno montañoso. Son los cauces de comunicación naturales, fácilmente accesibles y navegables, en medio de las montañas y los bosques. Gracias a ellos, los noruegos se mueven, comercian y se comunican: es una sociedad acostumbrada a transportar las vacas en bote de remos, repartir el correo en barcos y a ver llegar a la Policía en una embarcación.

El trenecito de Flam

Tras una jornada entera de navegación llegamos a  Flam ó Flaam, está situado en uno de los brazos más interiores del fiordo de Sogne, el más largo de Noruega, pues penetra más de 200 Km. tierra adentro. Está encuadrado en el valle de Naeroy. Realmente Flam, se trata de una auténtica aldea y su verdadera atracción es poder tomar el singular tren que elevándose 900 metros garantiza un panorama espectacular hasta llegar a Myrdal.

Efectúa una parada dónde podremos encantarnos con la inmensa y hermosa cascada de Kjosfoss . Ver caer tan cerca una inmensidad de agua desde 93 metros de altura, deleitarte con un mini espectáculo musical te transporta a tiempos lejanos. Ya en lo alto de Myrdal, tenéis dos opciones: continuar con cambio de tren hacia otros destinos a través del túnel de Gravhalsen, bajando por el valle Raundasalen hacia Voss, cerca del Lago Vangs ó bajar a pie disfrutando de nuevas cascadas hasta la siguiente estación ya en ruta de regreso. Nosotros optamos por esta última pues queríamos disfrutar al máximo de la naturaleza.

Los billetes se pueden sacar en la misma estación aunque os sugiero, ante la elevada afluencia de turistas, que los reservéis anticipadamente en vuestra compañía de crucero.

HELLESYLT y GEIRANGER: «La cima del país de los fiordos».

De regreso a nuestro crucero y después de atravesar el Storfjorden iniciamos el recorrido del fiordo Sunnlysfjord, en cuyo final se enclava Hellesylt, aproximadamente a 100 Km de distancia del mar abierto. Desde Hellesylt se pueden visitar en autobús sus cascadas que se precipitan sobre el fiordo. A través de los condados de Moere og Romsdal y Song og Fjordane llegamos al lago más profundo de Europa: el Hornindal (514 mts.). Desde allí se llega al Nordfjord, para continuar a lo largo del rio Stryn, famoso por la pesca del salmón, y desembocar en el lago Hjelle. La carretera de Strynfjell, es un camino con numerosas curvas que atraviesa el puente Jolbrua y bordeando el río nos llevará en dirección a Djupvasshytta para encarar la cima del monte Dalsnibba.

Geiranger

Su belleza es realmente impresionante y su navegación fascinante. Las joyas de la corona de este fiordo lo representan sus bellísimas cascadas y la sublimación viene representada por tres de ellas: » Las siete hermanas», » El velo de la novia» y «El pretendiente». Está última se encuentra en el lado opuesto a las anteriores y el descenso de su agua, según la leyenda, sigue siendo un reto para conseguir el amor de una de las hermanas. El «velo de la novia» deja transcurrir el agua, desde una considerable altura, de forma tan dispersa que en su caída asemeja un velo. La cascada de las siete hermanas, la forman siete cascadas perfectamente diferenciadas en el mismo conjunto. Fue retocada ligeramente en los años 30 para dividir de forma más cuidadosa su caída y conseguir de esta forma un efecto realmente espectacular. ¡Que pena que el crucero seguía avanzando, aunque es una visión que difícilmente olvidaremos!.

Geiranger es una pequeña localidad que cuenta con un hotel de 450 habitaciones (dónde se hospedan los Reyes de Noruega). Con sólo ascender 3 Km. ya nos encontramos a una cota de 250 mts. sobre el nivel del mar y allí dispondremos de un espléndido mirador dónde podremos contemplar la vista más reconocida de Giranger y su fiordo. Nos encaminamos a coronar el Monte Dalsnibba, a 1.500 mts. de altitud. Antes, a 1.030 mts. de altitud y después de recorrer 22 curvas de 180 grados por una carretera construida entre 1.881 y 1.889, con 14 puentes, hemos podido apreciar multitud de cascadas y apreciar el típico color azul de los glaciares.

Llegamos al Lago Djudvas. La visión es impactante, pues se encuentra totalmente helado. Un buen chocolate caliente y el autobús recorre el último para coronar el Monte Dalsnibba. Las vistas, hacia Geiranger y su fiordo, espectaculares. Como dice la leyenda, amontonamos unas cuantas piedras, pues de esta forma volveremos a visitar Noruega

Bergen

Cualquier recorrido en barco por los fiordos tiene una escala imprescindible, Bergen, la antigua capital del país en los siglos XII y XIII y una de las ciudades más antiguas de Noruega. Dicen sus habitantes que Bergen tiene “los pies en el mar, la cabeza en las nubes y el corazón en Noruega”, y así es.

Bergen es una ciudad vieja, pero con espíritu joven, declarada Patrimonio de la Humanidad y principal centro turístico del país. La vida en Bergen tiene su centro neurálgico en el barrio de Bryggen, que es uno de los barrios medievales mejor conservados de Europa, con sus casas de pescadores y su ambiente. Imprescindible es la visita al mercado de Pescado de Torget, en el muelle, donde cientos de personas disfrutan en plena calle de sus exquisitos pescados y mariscos.  En Bryggen vivieron los comerciantes hanseáticos entre 1350 y 1764. La llamada Liga Hanseática fue fundada en Alemania para proteger a los comerciantes y se extendió con posterioridad por Escandinavia. Pero lo más llamativo de Bryggen son sus pubs y cervecerías, sus exclusivos restaurantes y sus sofisticadas joyerías. El otro paseo imprescindible es el que nos lleva por sus bellas iglesias, sobre todo a Mariakirken, que, con casi mil años, es el edificio más antiguo de la ciudad. No debemos regresar al barco sin antes ascender al monte Floien en funicular. Desde su cima, las vistas son impresionantes, con la ciudad de Bergen a nuestros pies, y al fondo cientos de diminutas islas. Muy recomendable hacer a pie el recorrido de vuelta. La sensación de estar en plena naturaleza y al mismo tiempo muy cerca del centro de la ciudad, es verdaderamente única.

Stavanger

Es la cenicienta de Noruega. En el siglo XIX, lo único que tenía eran arenques. Desde 1870, no hubo ni eso. La gente tuvo que emigrar masivamente. En 1969, descubrieron petróleo en sus costas y la riqueza inundó la ciudad. Stavanger, capital europea de la cultura en 2008 y capital del petróleo de Noruega. No puedes dejar de dar un paseo por la ciudad  y sus interesantes muestras de arquitectura residencial de la vieja burguesía, así como el monumento de la espada en la piedra. En el mismo camino que lleva a este monumento, puedes encontrar una  granja que data de la Edad de Hierro, visitar la Torre Ullandhaug, la catedral, y por último, dar un paseo por el casco antiguo y tiendas de  Stavanger en el camino de regreso al puerto.

Oslo

Nuestra última escala, antes de dejar el barco definitivamente nos lleva a Oslo, capital del país. Pero antes nos esperaba una sorpresa, una regata de veleros, nos acompañó durante nuestras 2 últimas horas en el barco; un espectáculo maravilloso, ver cientos de barcos con las velas desplegadas confundirse entre la niebla.

Toda visita a esta tranquila ciudad, que en los últimos años está viviendo un verdadero lifting, debe incluir el ayuntamiento, lugar donde todos los años se entrega el Premio Nobel de la Paz, el Parlamento, El Teatro Nacional, el Palacio Real y el nuevo edificio de la Opera. La visita al parque Vigeland, caracterizado por sus 212 estatuas de bronce desnudas, es también muy recomendable.

Como llegar

Hay vuelos directos desde Madrid a Copenhague con las compañía Norwegian, SAS y Lufhansa. A  Oslo con la compañía Ryannair, Iberia, SAS y desde Oslo SAS tiene vuelos diarios a Bergen, Trondheim o Stavanger. También se puede viajar en avión desde Oslo con SAS, Braathens, Wideroe y Norwegian.

Cuándo hacer un crucero a los fiordos.

La temporada de los fiordos va desde mediados de Mayo hasta mediados de Septiembre, siendo la temporada alta entre Junio y Agosto que coincide con las mayores temperaturas. La temporada baja ( y por supuesto con mejores ofertas de cruceros) sería a principios de Mayo y a finales de Septiembre. Si se quiere disfrutar el sol de medianoche el mejor momento es alrededor del solsticio de verano el 21 de Junio.

Compañía de cruceros por los fiordos:

COSTA CRUCEROS
Tel. 91 5558550
www.costacruceros.es
saez@es.costa.it

Duración.
Lo normal oscila entre varios días a un par de semanas. Lo más común son cruceros de 7 días.

Qué llevar.
Para Noruega la técnica de vestirnos en capas es lo más práctico. Al enfrentarnos con entornos naturales es importante disponer de un calzado cómodo y acorde con el tipo de excursiones que pensamos realizar. Nunca olvidar el chubasquero ya que incluso en verano es frecuente las tormentas.

Comer en Copenhague:

Café Norden. Ostergade, 61. Deliciosas ensaladas en una de las plazas más bellas de la ciudad

Faergekroen Bryghus. Una “casita de muñecas” a orillas de lago en el parque Tívoli, el parque de atracciones más antiguo de Europa, en pleno centro de la ciudad.

Havfruen. Nyhavn, 39. Para comer en terraza en pleno puerto viejo.

Ved Stranden. Ved Strnden, 10.  Maravillosa vinoteca donde se concentra la gente guapa de la ciudad.

Comer en Oslo:

Gran Café. Kart Johans Gate, 31. Exquisito Jazz Brunch. lugar de encuentro de artistas, políticios e intelectuales, en la segunda mitad del siglo 19, donde Ibsen y Munch, eran visitantes frecuentes.

Christiania Café. Nedre Vollgt, 19. Sabores tradicionales y divertida decoración.

Ekeberg. Kognsveien 15. Situado sobre una colina con las mejores vistas de la ciudad y el fiordo.

Made. Kongens gate 5. El restaurante más cool de Oslo, en el Grims Grenka hotel.

Dormir en Copenhague:

Clarion Collection Hotel Mayfair. Helgolandsgade, 3. (precio medio)

Copenhagen Admiral Hotel. Toldbodgade 24-28. (precio alto)

71 Nyhavn Hotel: Nyhavn, 71. Boutique Hotel con excelentes vistas al puerto.

Dormir en Oslo:

Clarion Hotel Royal Christiania y el Clarion Collection Hotel Folkteateret

Mas información: www.visitnorway.com/es

 

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