Descubriendo las Terres de l’Ebre
Fotografía: Mariano Cebolla
Donde los detalles atrapan
¿Te gusta la naturaleza? Si es así, en las Terres de l’Ebre encontrarás playas extensas y tranquilas, los espacios vírgenes del Parque Natural del Delta de l’Ebre o las montañas del Parc Natural dels Ports. Si prefieres descubrir el patrimonio histórico o cultural, puedes optar por visitar las pinturas prehistóricas declaradas Patrimonio de la Humanidad o las imponentes fortificaciones construidas por árabes y templarios. Y si lo que te entusiasma es conocer la cultura popular, un paseo por los pueblos marineros o de montaña te ayudaran a conocer y comprender el carácter de sus gentes.
Esto es solo un resumen del gran potencial turístico que ofrecen las Terres de l’Ebre, el conjunto de cuatro comarcas situadas en el extremo sur de Cataluña. Toda esta diversidad de espacios permite que cada visitante escoja la opción que más se ajusta a sus necesidades, lejos de las aglomeraciones y de los circuitos turísticos convencionales.
Las Terres de l’Ebre están situadas entre el mar Mediterráneo y los contrafuertes más meridionales de la sierra prelitoral catalana. Además, las aguas tranquilas del Ebro – el río más caudalosos de la península ibérica – modelan este territorio y forman meandros que tranquilamente lo conducen por la llanura del Delta hasta llegar al mar. Precisamente el último tramo del río Ebro ha sido un lugar de encuentro y mezcla de culturas, así como un punto estratégico para el comercio – para la entrada de productos desde el mar hacia las tierras del interior – y ha cautivado todo tipo de civilizaciones: los íberos, los romanos, los árabes, los judíos y los cristianos.
El paso de todas estas gentes ha dejado un importante legado histórico y cultural que se nota en las tradiciones populares, en los monumentos, el habla y, también, en el carácter de la gente.
El clima
El clima templado hace agradable la visita a las Terres de l’Ebre en cualquier época del año. Esta región del sur de Cataluña goza de un clima mediterráneo que se caracteriza por tener veranos cálidos con predominio del sol y los inviernos templados, con algunas lluvias que se concentran en el período de primavera y de otoño. Durante los meses de más frío, sopla el mestral – viento del noroeste – que deja el cielo nítido y permite contemplar los fabulosos paisajes sin la interposición de las nieblas. En cambio, el garbí es la ventolina de las tardes de verano que recoge la frescura de la mar y la proyecta hacia el interior.
En invierno las temperaturas oscilan entre los 20 grados de máxima y 0 de mínima. De manera puntual la nieve emblanquece la comarca de la Terra Alta y las cimas más altas del macizo de los Ports. En cambio, en verano las temperaturas bordean los 35 grados, aunque durante la noche la presencia del mar tempera el ambiente y el mercurio del termómetro cae hasta los 15 grados. De esta manera, el clima estable y templado de las Terres de l’Ebre propicia la práctica de actividades al aire libre durante todo el año.
Las comarcas
Las Terres de l’Ebre están formadas por las cuatro comarcas más meridionales de Catalunya: el Baix Ebre, el Montsià, la Terra Alta y la Ribera d’Ebre. Tal como indica su nombre, su identidad se vertebra alrededor del curso del río Ebro.
La Ribera d’Ebre es el territorio más septentrional de todas estas tierras. Al norte limita con las comarcas tarraconenses del Priorat y del Baix Camp, y con las del Segrià y Les Garrigues (en este caso dentro de la provincia de Lleida). Al sur de la Ribera d’Ebre encontramos la Terra Alta y el Baix Ebre.
La Terra Alta, además, también forma frontera con la comarca del Matarranya, dentro de la Comunidad Autónoma de Aragón.
Al sur encontramos el Baix Ebre. Ésta es, precisamente, la única comarca que bordea, a la vez, todos los territorios de las Terres de l’Ebre: Terra Alta y Ribera d’Ebre al norte y Montsià al sur.
Finalmente, el Montsià está situado en el extremo sur de Catalunya. Al norte limita con el Baix Ebre y en su vertiente meridional es vecino de la comarca del Baix Maestrat que forma parte de la Comunidad Autónoma del País Valencià.
El carácter frontera de les Terres de l’Ebre, permite que su área de intercambio social y cultural traspase el territorio estrictamente catalán y llegue a las comarcas del norte de las comunidades de Valencia y de Aragón, zonas con las que mantiene un intenso intercambio cultural y humano.
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