Lanzarote, la eterna primavera

¿Cómo resumir esta isla? Es geología pura, paisajes submarinos y lunares, aguas transparentes, tierras sedientas y oasis de palmeras. Sin duda, tierra de contrastes donde encontrarás la convivencia en armonía del hombre y la naturaleza.

Localización:

Esta isla es la más oriental de las Islas Canarias y se identifica por la gran cantidad de volcanes que se extienden por ella. Lanzarote se encuentra a una distancia de 1.000 km de la Península Ibérica y a 140 de la costa africana. Tiene una superficie de 845,93 km. y una población de 135.000 habitantes.

En el norte de la isla se encuentran los islotes o islas menores de La Graciosa, Alegranza, Montaña Clara, Roque del Este y Roque del Oeste. Lanzarote posee el Parque Nacional de Timanfayay que está bajo la protección de Reserva de la Biosfera de la Unesco.

Eterna primavera:

La temperatura media anual es de 21º C y es por esto que durante todo el año invita a todo aquel que busque algo más que sol y playa disfrutar de una serie de actividades en la naturaleza. Se puede practicar buceo, senderismo, trekking, surf, windsurf, kitesurf, golf… además de un gran abanico de posibilidades como visualizar espectáculos con animales, pasear a caballo, conocer la flora y fauna autóctonas, e incluso para los niños poder deslizarse por los toboganes del parque acuático, conocer el mundo marino…

César Manrique:

Como no podía ser de otra manera, antes de hablarte de sus maravillosas playas, de por qué es un sitio ideal para la práctica del buceo o el surf, tenemos que empezar por destacar al pintor, escultor, arquitecto y artista español originario de esta isla: César Manrique. Cualquier autóctono te recomendará visitar alguno de sus espacios diseñados como por ejemplo, el Jardín de Cactus, Jameos del Agua o el Mirador del Río, por destacar algunos. También puedes visitar su Fundación, ubicada en la antigua residencia del artista en Taro Tahíche, acoge hoy en día sus obras (esculturas, dibujos, pinturas…) y las de otros artistas.

Playas:

Las playas de Lanzarote constituyen una invitación para disfrutar del mar ya que la temperatura media anual del agua ronda los 19.5º C.  Hay  innumerables playas y calas, y ña buena fama de algunas ha trascendido más allá de nuestras fronteras, como son los casos de:

Papagayo: Es la joya de la corona de las playas de Lanzarote. El baño más apetecible que resalta por su magnífica arena dorada y el contraste colorístico de sus aguas. Son casi dos kilómetros de diferentes calitas bautizadas como playa Mujeres, El Pozo, Caleta del Congrio, Puerto Muelas y El Papagayo.

Famara: Seis kilómetros de majestuosa playa. Cobijada por el risco montañoso que acoge el punto más alto de la isla, Peñas del Chache (670 metros), Famara es una de las estampas paisajísticas más impactantes de la isla.

Pero hay otros escenarios desconocidos donde echarse al sol y tomar unos baños perfectos. Si quieres conocer en detalle las principales, pincha aquí.

Surf:

El surf encuentra en Lanzarote uno de los mejores lugares del planeta para su práctica, siendo sus olas comparables incluso a las míticas de Hawai. Se da la circunstancia de que muchos deportistas compaginan la tabla de surf con el windsurf, pues cuando el viento no favorece la práctica de uno, siempre posibilita ejercitarse en el otro. Una buena zona para la práctica del windsurfing en Lanzarote es la Playa de las Cucharas en Costa Teguise.

Buceo:

La isla de Lanzarote posee unas características extraordinarias, gracias a la enorme amplitud de fondos con poca profundidad y la cálida temperatura del agua todo el año con una visibilidad de hasta 40 metros, lo que permite realizar todo tipo de inmersiones en su bello y diferente paraje submarino.

Es todo un espectáculo contemplar meros, rayas, morenas, un amplio abanico de especies autóctonas que destacan por su variedad de formas y colores. Una riqueza capaz de satisfacer a los más exigentes.

Leído en: todopersonal.com

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