Las Landas: vacaciones familiares de playa y bicis
Playa de las Landas (lolito de palermo / Flickr)
Pensando ya en el próximo verano, y en unas vacaciones familiares y tranquilas, las Landas francesas son un un paraíso de carriles bicis entre bosques de pinos, justo al lado del mar. Y una muy buena opción para recorres estos espacio es el camping con tienda de campaña, o en autocaravana, que da una gran libertad de movimientos.
Puedes empezar a bordear la costa del Atlántico desde Biarritz, una ciudad emblemática del País Vasco-Francés, que seguro que te encantará. Tras dejar atrás Bayona y el País Vasco-Francés, nos adentramos propiamente en las Landas, sus pueblos y playas.
Las playas de Las Landas están llenas de surferos. Son playas inmensas, delimitadas por una gran duna y el bosque. Son salvajes y peligrosas, excepto en la pequeñas zonas vigiladas y acotadas por los policías franceses, especializados en salvamento marítimo.
Cada población tiene su aparcamiento preparado para las furgonetas y autocaravanas, y por los carriles bici que unen los pueblos se mueven familias enteras en bici. Hay cientos de campings, para todos los bolsillos, por lo que no hay problema para encontrar encontrar plazas libres, salvo en momentos del año muy concretos.
La libertad de la autocaravana te permite desplazarte con placidez hacia el norte, y parar unos días cuando encuentras un sitio que te gusta. Y seguro que encontrarás muchos…
Así puedes descubrir el pequeño pueblo de Leon, con su lago, el mercadillo, los paseos por los bosques y el “aire naturelle Au Gat”, un camping especial, sin parcelas y en pleno bosque, donde los niños pueden hacer nuevos amigos de otros pasíses, relacionándose con ellos en el idioma internacional de los juegos.
Uno de los paseos más conocidos en la zona del lago Leon recorre la reserva natural de la “Courant d’Huchet”, una corriente de agua que se desplaza desde el lago hasta el mar. Se puede acceder en barco o con paseos guiados, pero también es muy agradable pasear por allí a tu aire.
Otra parada obligatoria es el Ecomuseo de Marqueze, una granja landesa reconstruida tal y como era en el siglo XIX, a la que se accede en un viejo tren de vapor desde el pueblo de Sabres. Se pueden visitar las diferentes casas que componían la granja, con una ambientación muy detallada de cómo estaban hace casi dos siglos.
Siguiendo hacia el norte se llega al faro de Contís, un faro en medio del bosque. Atención, que solamente se visita un día a la semana, pero merece la pena enterarse, ya que las vistas desde ahí arriba son increíbles.
En casi cualquier rincón de Las Landas se pueden alquilar bicis, y son cientos los kilómetros de vías preparadas para disfrutar de la bici por un terrreno acondicionado y en general muy llano.
En las Landas las puestas de sol son especiales y cada tarde puedes disfrutar de este grandioso espectáculo en un lugar diferente. Desde los rincones más desconocidos hasta la duna de Pilat, uno de los sitios que más turistas recibe en la zona y que merece la pena visitar y ascender por las escaleraspara disfrutar de las espectaculares vistas sobre la bahía de Arcachon desde su cima. Es la duna más grande de Europa (unos 3 km. de largo y unos 110 metros de altura, más o menos).
Capbreton, Hossegor, Mimizan, Leon, Bicarrosse, Lit-et-Mixe, Pontenx-les-Forge, Molliets, Saint-Julien-en-Born… preciosos pueblos de las Landas repletos de playas y hermosos rincones para descubrir.
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