Los Parques Nacionales de Lituania
Lituania cuenta con numerosos parques, regionales y nacionales, en los que en la mayor parte de los casos nos encontramos además con hermosos emplazamientos históricos. Son áreas protegidas cuya finalidad es la preservación de las características naturales y culturales del país.
En Lituania existen cinco Parques Nacionales: Dzūkija, Aukštaitija, Curlandia, Samogitia y la reserva histórica de Trakai. Le invitamos a visitarlos.
El Parque Nacional del Istmo de Curlandia
Incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es el área protegida más visitada de Lituania. Está enfocado a la preservación de las raras especies de plantas y animales característicos de esta zona, que son particularmente importantes para la biodiversidad paneuropea.
La gran belleza del paisaje del Istmo de Curlandia es una creación única de la naturaleza y también de algunos esfuerzos realizados por el hombre. En los siglos XIV a XVIII, las dunas de arena enterraron más de un pueblo de pescadores, por lo que la gente comenzó a luchar contra el inexorable viento y a finales del siglo XVIII, replantaron la superficie deforestada e instalaron refuerzos en la arena, siendo las dunas del Istmo de Curlandia, finalmente domesticadas por el hombre.
Hoy en día, las dunas costeras lituanas son las más altas de Europa, por lo que al visitar el Parque Nacional del Istmo de Curlandia no pierdas la oportunidad de disfrutar de ellas, sube a la Gran Duna, o da un paseo por las dunas grises entre Juodkrante y Pervalka.
Parque Nacional de Samogitia
Un verdadero descubrimiento para aquellos que viajan con el fin de explorar los la naturaleza y tradiciones originales de la región.
Viajeros en bicicletas, turistas, amantes de la naturaleza, buceadores, deportistas acuáticos, aficionados a la pesca y entusiastas observadores de aves, son todos bienvenidos a Samogitia.
El lago Plateliai, bosques grandes y densos, la arquitectura de Žemaičių Kalvarija, los productos artesanos en madera, así como el alboroto de la tradicional celebración de Mardi Gras, son sólo algunas de las numerosas cosas que merece la pena visitar cuando se está en el Parque Nacional de Samogitia.
Parque Nacional de Aukštaitija
Famoso por sus lagos, colinas, bonitas aldeas y también por sus abundantes bosques y la armonía de la naturaleza.
Sube a la colina Ladakalnis y disfruta de una panorámica que incluye hasta seis lagos y permite disfrutar de la impresionante belleza de los alrededores. Una vez llegues a Ladakalnis, no dejes de visitar el cercano molino de agua de Ginuciai, que conserva su auténtico equipamiento: una rueda de agua, un mecanismo de elevación con bolsa y una piedra de molino. Si también viajas por el Parque Nacional Auk Taitija, visita el antiguo Museo de Apicultura donde podrás ver con sus propios ojos cómo solían ser las colmenas lituanas en el siglo XVI y probar un poco de miel muy fresca.
Parque Histórico Nacional de Trakai
Un parque único. Es el foco del patrimonio cultural, la historia y la arqueología, siendo la intersección de la historia de la antigua capital de Lituania, Trakai y de todo el país.
El centro histórico del parque consiste en el casco antiguo de Trakai, el complejo del castillo en la península con su majestuosa y romántica historia y el Castillo de Trakai que es el único en Europa del este construido en una isla. El paisaje de este singular patrimonio cultural y natural refleja importantes períodos históricos del país y deja una impresión duradera en cada uno de los que visitan el lugar.
Parque Nacional de Dzūkija
Este parque es el área protegida más grande de Lituania y acoge numerosos tesoros naturales y culturales. Toda la región es rica en yacimientos que datan de la Edad de Piedra. También es conocida por sus hermosas vistas de las colinas.
Los pueblos de Dzūkija conservan la estructura tradicional de la aldea, los edificios antiguos de alquerías recuerdan el estilo de vida antiguo de los lugareños. Los artesanos de estos lugares son muy hábiles y famosos por la cerámica negra y en los pueblos todavía es posible ver a alguien tejiendo en un telar o realizar cestería.
En otoño y en verano, la gente acude a los bosques de Dzūkija con sus cestas, ya que la zona es especialmente rica en setas y bayas.
Leído en el blog de Alvaro Laforet
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