Galicia en una semana
Ría de Arousa (Foto: Caty / Flickr)
Si tienes previsto visitar Galicia, te traemos esta ruta que está preparada para una duración de 5-6-7 dias —es decir, aproximadamente para una semana— que puede serte de gran ayuda para organizar el viaje. Puedes tomarla al pie de la letra o simplemente ir adaptándola a tu necesidades. Recuerda que es una ruta orientativa.
Esta ruta la podemos empezar o bien directamente en Lugo, si llegamos a Galicia en coche por la A-6 que va de A Coruña a Madrid, o desde Santiago. Si llegamos a Santiago, por ejemplo en avión y alquilamos un coche, podremos ir directamente a Lugo o pasar el primer día en la ciudad de Santiago.
Día 1: Lugo y la Mariña lucense
Empezamos por la ciudad de Lugo, donde podemos admirar las famosas Murallas de Lugo, además de disfrutar de un coqueto y acogedor centro histórico, pasando por la Catedral. Nos llevaría medio día como mucho, y además podemos comer y tapear en algunos locales del centro.
Luego podemos subir hacia el norte, pasando por localidades como Mondoñedo (Catedral) y llegar a la famosa Playa de las Catedrales, muy cercana a Ribadeo, donde podríamos buscar alojamiento y descanzar.
Playa de las Catedrales, Ribadeo (Foto: Tuscasasrurales / Flickr)
Día 2: De la Mariña lucense a las Rías Altas
Al día siguiente tomamos dirección Ferrol-A Coruña, por las Rías Altas, pasando por pueblos marineros y lugares como Foz, Burela, Ría de O Barqueiro, Ortigueira y su ría, Serra da Capelada, San Andrés de Teixido y Cedeira…
Recomendable visitar la Capelada, con los acantilados mas altos de Europa, donde además disfrutarás de caballos en libertad y del mirador Vixía de Herbeira. Y por supuesto, el pueblo y la ermita de San Andrés de Teixido, algo único y muy recomendable.
En esta zona se come muy bien, sobre todo en Cedeira, donde también podemos dormir, o ir directamente a Ferrol.
San Andrés de Teixido (Foto: david perez / Flickr)
Día 3, Las Rías Altas
Seguimos hasta Ferrol, donde es recomendable visitar la zona monumental, para a continuación seguir la ciudad de A Coruña. Si tenemos tiempo, en Pontedeume nos encontramos con las Fragas do Eume, un precioso espacio natural.
En A Coruña disfrutaremos de una de las ciudades mas bonitas del mundo (en serio) y de su ambiente nocturno, donde ir de vinos y tapeo es imprescindible. Un lugar con encanto está situado enfrente de A Coruña, un pueblo llamado Santa Cruz (Oleiros), con un castillo en una pequeña isla que servía para proteger de los ataques de los corsarios ingleses.
Día 4: La Cosa da Morte
Posteriormente seguimos dirección hacia la legendaria Costa de la Muerte, donde veremos auténticos pueblos marineros, playas vírgenes, acantilados y paisajes espectaculares… Debemos ver pueblos marineros (al menos alguno) como Corme, Laxe, Malpica, Camariñas, Muxía, Finisterre, Cee y Corcubón, Carnota…
Algunos lugares para hacer fotografías en esta ruta son el Faro do Roncudo en Corme (en cuyos acantilados se dan los mejores percebes del mundo), Cabo Vilano, Muxía (desde la capilla de la Virgen de la Barca) y desde el Faro de Finisterre.
Cabo Vilano (Foto: Juan Manuel Lado Castro / Flickr)
Al llegar a Finisterre no desviamos hacia Muros y vemos el monte Pindo, con su cascada que cae sobre el mar, la Playa de Carnota (la más grande de Galicia). En esa zona veremos impresionantes playas y paisajes preciosos.
Día 5: la Ría de Arousa y Rías Baixas
Una vez visto Muros y Noia, seguimos por la costa hacia la Ría de Arousa, visitando localidades como Porto do Son, Ribeira, las Dunas de Corrubedo… De esta forma, podemos conocer la catedral de Santiago por la tarde, recorrer el casco historico, e irnos de vinos y raciones por las Calles de O Franco y a Raiña, míticas para ello.
Para seguir la ruta, podríamos tomar dirección a las Rías Baixas pasando por la villa histórica de Padrón (ver la Fundación Camino Jose Cela y Casa Museo de Rosalia de Castro, en Iria Flavia). Srguimos y pasamos por Catoira, donde estan sus famosas Torres do Oeste. Estas torres sirvieron de protección para los ataques normandos a la propia ciudad de Santiago, por ello se celebra una famosa fiesta popular, la Romeria Vikinga, donde se recrea con barcos un desembarco vikingo y la batalla por la defensa de la ría.
Seguimos hacia Villagarcia de Arousa y antes de llegar a esta villa, nos encontramos con Carril, un pequeño pueblo marinero famoso por sus almejas. Justo enfrente tenemos la Isla de Sálvora, perteneciente al Parque Nacional de las Islas Atlánticas (junto a Cies, Ons…).
Villagarcia es un importante destino turístico, pero deberíamos seguir cara al sur, saltándonos sino tenemos mucho tiempo lugares como la Illa de Arousa, pero parando en Cambados, la capital del Albariño y un interesante pueblo con su casco histórico y la plaza del Pazo de Feriñans. Tenemos la posibilidad e visitar y conocer algunas bodegas, donde conocer como se hace el Albariño (Rías Baixas) y catarlo..
Siguiendo hacia el sur, llegamos a O Grove, pasando por la playa de A Lanzada (maravillosa vista desde el monte Siradella). O Grove es una importante villa marinera y turística. Aquí podemos visitar la Isla de la Toja, visitar algún restaurante o marisquería, o subirnos a algún catamarán que os enseñara la ría, los fondos marinos y algunas bateas. En estes paseos suelen ofrecer degustaciones de mejillones (abundantes y regadas con Rías Baixas).
O Grove (Foto: Gabriel González / Flickr)
Si salimos de O Grove direccion Sanxenxo, antes nos encontraremos con Portonovo. Estos dos lugares, unidos por un paseo maritimo, distan unos escasos 200 metros, pero se nota un poco la diferencia de turismo. En Portonovo, el turista suele ser mas joven y con ganas de fiesta, por lo que el pueblo cuenta con muchos pubs y discotecas. Luego está Sanxenxo, con sus bonitos hoteles, edificios, puerto deportivo…
Saliendo de Sanxenxo, direccion Pontevedra, nos encontraremos con Combarro, pequeño pueblo conocido por tener sus casas y horreos pegados al mar. Llegados a Pontevedra, podemos ver su precioso y coqueto casco historico en cuyo centro nos encontramos con la Plaza de España. No debemos irnos sin pasear por el casco antiguo y acercarnos a admirar el santuario de la Peregrina, la patrona de la ciudad.
Si lo que queremos es ver cosas diferentes y vivir experencias nuevas, seguimos direccion Vigo y entramos en esa ciudad por el famoso puente de Rande. En Vigo no debemos perdernos una visita la mercado da Pedra (y degustar las famosas ostras), pasear por el casco antiguo y subir al Monte Castro, donde tenemos una de las mejores vistas de la ciudad y de la Ría de Vigo, con las Islas Cies al fondo.
En Vigo, podremos disfrutar además de una de las playas más bellas de Galicia, la Playa de Samil. Pero lo mas impresionante de Vigo son las islas que guardan la entrada de su ria, las Islas Cies.
Islas Cies (Foto: Manuel R. V. / Flickr)
Saliendo de Vigo hacia el sur, dirección Baiona, veremos impresionantes playas como Playa America. Baiona es parada imprescindible. Este pueblo fue el primero de Europa en recibir la noticia del descubrimiento de América. Por ello, en su puerto se encuentra una replica exacta de la Carabela La Pinta, que se puede visitar, pues es museo. Baiona tiene un hermoso casco historico, y un bonito puerto deportivo situado a los pies de la fortaleza Monterrreal, donde además se situa el Parador de Baiona.
De Baiona hacia el sur, podemos visitar A Guarda (famosa por sus langostas), localidad que se encuentra a los pies de monte de Santa Tecla, en cuyas laderas se encuentra un famosos castro y en su cumbre la capilla de Santa Tecla. Alli verás una de las mejores vistas de Galicia, la desembocadura del Miño, con Portugal al otro lado.
Si contamos con un más, al tiempo que abandonamos Galicia por la Autovía que une Vigo con Madrid, podemos desviarnos y visitar la Ribeira Sacra, y alojarnos en sus maravillosos pazos o casas rurales. Allí veremos una panoramicas que dejan sin hipo. Tambien podemos navegar en catamarán por esta zona, asi como visitar bodegas de vino mencia y godello con la denominacion «Ribeira Sacra».
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