Turismo rural y de interior en la Región de Murcia

El Valle y Carrascoy. (Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística)

El Valle y Carrascoy. (Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística)

 

La Región de Murcia es conocida por sus playas. Kilómetros de Costa Cálida bañada por el Mar Mediterráneo, con sus aguas cálidas y su agradable temperatura todo el año.

Pero la Región de Murcia también tiene montaña, bosques, cuevas, y paisajes que te costaría creer están en estas latitudes. Sin duda una región completa donde disfrutar del buen clima y el turismo de interior. Un lugar para realizar deportes de aventura, senderismo, o simplemente descansar rodeado de bonitos bosques y pueblos con encanto. Si te gusta el turismo de interior, no te pierdas todo lo que puedes hacer en estas cuatro zonas de Murcia.

El Nordeste, viñedos en el altiplano murciano

El valle del Aceniche. Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística

El valle del Aceniche. (Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística)

La Comarca del Altiplano murciano está cubierta por los viñedos de las Denominaciones de Origen Jumilla y Yecla. Además de poder adentrarse en las Rutas del Vino y degustar los ricos caldos que se producen, esta comarca cuenta con otros atractivos interesantes como el Monte Arabí, también conocido como la Montaña Mágica.

En los parques regionales de las Sierras del Carche y la Pila, podrás recorrer diversas rutas de senderismo. También realizar actividades de turismo activo como volar en parapente o ala delta. Además de disfrutar de paisajes de gran valor natural y geológico.

Visita viñedo de la región de Murcia. Bullas. Fuente: Murcia Turística

Visita viñedo de la región de Murcia. Bullas. (Fuente: Murcia Turística)

Jumilla y Yecla son conocidas por sus vinos. Pero te sorprenderá saber que puedes perderte caminando entre fósiles y pinturas rupestres por la Sierra de La Cingla y la Sierra de la Pedrera. Además, puedes visitar el Castillo de Jumilla, el Convento de Santa Ana, o el antiguo poblado y la fortaleza musulmana de Yakka, en Yecla.

Con una larga tradición vinícola, la Denominación de Origen Jumilla es de las más antiguas de España (1966). Sus amplios valles y su clima – sin precipitaciones, frío en invierno y cálido en la época estival – son perfectos para el tratamiento de diferentes tipos de uva y la elaboración de sus vinos. Unas características que comparte con Yecla, donde su Denominación de Origen cuenta con producciones muy cotizadas por las condiciones extremas de sus viñas.

Tanto en Jumilla como en Yecla la cultura del vino está presente también en sus platos. Entre los más reconocidos están sus quesos, sobre todo el de cabra con el que se elabora el queso de Murcia al vino, que une a sus dos productos estrella. Otro alimento muy presente en ambas cocinas es el queso de cabra frito con tomate.

El clima murciano también influye en su gastronomía, donde destacan los platos contundentes y generalmente calóricos. Algunos de los más tradicionales son las gachasmigas, compuesto de harina, aceite, ajos, agua y sal; las empanadas de patata, rellenas de patatas, atún, huevo, pimientos, piñones y perejil; el arroz con conejo y caracoles; y el relleno o pelotas, dos grandes bolas de pan rallado remojado en agua o leche con magro picado, condimentado con diferentes especias y bañadas en caldo de cocido.

Los gazpachos también son muy comunes. El más común es el jumillano, que está compuesto de una torta de harina de trigo sin fermentar mezclada con la carne de caza y caracoles serranos. En los postres, en ambas localidades destacan los rollos de vino, los pasteles de anís, los mantecados de almendra y los sequillos.

El Noroeste, zona de montañas, valles y cañones

Cañón de Almadenes. Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística

Cañón de Almadenes. (Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística)

Si el Nordeste es planicie y vino, el Noroeste está salpicado de montañas, valles, cañones y cuevas. En Bullas, además de degustar vinos y conocer bodegas, podemos caminar entre viñedos en el Valle del Aceniche. Pero además no podemos dejar de acercarnos hasta el Salto del Usero, un impresionante salto de agua que te dejará sin palabras.

En Calasparra está el santuario de la Virgen de la Esperanza de Calasparra, ubicado en el interior de una gruta. El Cañón de los Almadenes es ideal para desconectar en plena naturaleza, pero también para practicar deportes como Kayak. La Cueva del Puerto, lugar ideal para practicar espeleología recorriendo sus cavidades y formaciones de estalactitas y estalagmitas. Y si lo tuyo son las pinturas rupestres, no te pierdas el Abrigo del Pozo y la Cueva de Los Monigotes.

Cuevas de Zaen. Moratalla. Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística

Cuevas de Zaen. Moratalla. (Fuente: Sergio Gonzalez. Murcia Turística)

Caravaca de la Cruz es una de las cinco ciudades del mundo dónde se celebra el jubileo perpetuo, siendo este 2017 Año Jubilar. Cada siete años, se convierte en lugar de peregrinación para miles de personas que recorren el Camino de la Cruz. Otra ruta que cada vez más gente realiza es la Vía Verde que antiguamente era el ferrocarril que unía Caravaca con Murcia, un trazado de 78 kilómetros de longitud con albergues para poder descansar si vamos a pie.

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